Israel y Líbano enviaron por primera vez enviados diplomáticos a una reunión del comité de seguimiento del alto el fuego liderado por Estados Unidos el miércoles, ampliando las discusiones a medida que crecían los temores de que Israel pudiera renovar su ofensiva contra Hezbollah.
Hasta ahora, funcionarios militares de ambos países se han reunido con representantes de las fuerzas de paz estadounidenses, francesas y de la ONU en el Líbano. Pero el alto el fuego que ya lleva un año se ha visto cada vez más puesto a prueba por la escalada de ataques israelíes contra el grupo militante libanés Hezbollah.
Funcionarios israelíes y estadounidenses han estado advirtiendo que Israel podría lanzar una nueva ofensiva contra Hezbollah, respaldado por Irán, si el gobierno libanés no acelera el desarme del grupo como lo requiere el alto el fuego.
Los analistas vieron la medida como un paso importante hacia la ampliación de las conversaciones entre Israel y el Líbano en un momento de estancamiento cada vez más profundo. Hezbollah se ha resistido al desarme nacional a menos que Israel haga concesiones, incluido el cese de los ataques contra el Líbano y la retirada de las pocas áreas pequeñas que aún controla en territorio libanés.
Pero Israel se ha negado a cumplir esas demandas antes de desarmar a Hezbolá.
“Hay una fuerte presión para desarmarse dentro del gobierno”, dijo Mohanad Hage Ali, investigador del Centro Carnegie para Oriente Medio en Beirut, refiriéndose al Líbano. “Pero, al mismo tiempo, desarmar una organización con raíces populares en su propia comunidad no es una fuente de tensión interna mientras Israel continúa ocupándola y bombardeándola”.
“El gobierno libanés desea evitar esto y alcanzar una solución”, afirmó.
El comité de seguimiento liderado por Estados Unidos se creó para supervisar un alto el fuego que puso fin al conflicto más mortífero entre Israel y Hezbolá en décadas. Desde hace meses, la administración Trump ha presionado para ampliar las conversaciones entre Israel y el Líbano, que comenzaron después de que se alcanzara un alto el fuego hace un año.
El presidente libanés, Joseph Aoun, ha indicado que su país sigue abierto a conversaciones con Israel para consolidar un inestable alto el fuego. Pero tales conversaciones siguen siendo controvertidas dentro del Líbano, que ha estado oficialmente en guerra con Israel desde su fundación en 1948.
La oficina del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, dijo el miércoles que Israel enviaría un representante de su Consejo de Seguridad Nacional al comité de alto el fuego.
“Este es el primer intento de establecer relaciones y cooperación económica entre Israel y el Líbano”, dijo un comunicado de la oficina de Netanyahu.
El portavoz de Aoun dijo que el Líbano había designado a Simon Karam, ex embajador en Washington, para encabezar su delegación.
El comité de seguimiento del alto el fuego se reunió el miércoles en territorio libanés cerca de la frontera con Israel.
Morgan Ortagus, enviado de Trump a Oriente Medio, asistió a una reunión con funcionarios allí un día después de visitar Israel.
La Embajada de Estados Unidos en el Líbano dijo después de la reunión que la incorporación de funcionarios diplomáticos refleja su compromiso de lograr la seguridad, la estabilidad y la paz duradera.
Janatan Rais Informes de contribución.










