Jamie Foxx finalmente reveló el motivo de su misteriosa hospitalización el año pasado, compartiendo que sufrió un derrame cerebral causado por una hemorragia en el cerebro.
El actor de Django Unchained, de 56 años, fue llevado a Urgencias en abril del año pasado después de sufrir una misteriosa ‘complicación médica’, que su familia decidió mantener en secreto.
Ahora ha revelado exactamente lo que le pasó y recuerda haber perdido la memoria durante 20 días en medio de su terrible batalla de salud.
Ella dijo en su especial de Netflix Jamie Foxx: What Happened…: ‘El 11 de abril, tuve dolor de cabeza y le pedí aspirina a mi hijo. Rápidamente me di cuenta de que cuando tienes una emergencia médica, tus muchachos no saben qué hacer.
Luego admite: “No recuerdo 20 días”.
La estrella con los ojos llorosos admitió ante los espectadores que estaba “de regreso”: “No tenéis idea de lo bien que se siente”.

Jamie Foxx finalmente reveló el motivo de su misteriosa hospitalización el año pasado, compartiendo que sufrió un derrame cerebral causado por una hemorragia cerebral.
Jamie admitió que todavía es “un misterio” lo que pasó y añadió: “Todavía no sabemos qué me pasó”.
Después de abrir su frase con ‘lo que pasó’, Jamie rompió a llorar y se sintió reconfortado por los aplausos del público.
Luego dijo: ‘Tu vida no arde ante ti. Era algo extrañamente pacífico.
‘He visto el túnel, pero no la luz. Hacía calor en ese túnel.
Luego, Jamie bromeó: ‘Mierda, ¿voy al lugar equivocado?’
El actor ganador del Oscar le dio crédito a su hermana Deidra por “salvarle la vida” cuando ella “intencionalmente” lo giró antes de llevarlo al Hospital Piedmont en Atlanta, donde se sometió a un procedimiento que le salvó la vida.
Al abordar por qué su familia quería guardar para sí los detalles de su problema de salud, dijo: “Estaba mareado por el derrame cerebral, así que mi cabeza daba vueltas, y mi familia pensó que todo el mundo me iba a hacer un “meme de mierda”. .’
Jamie recuerda vívidamente que se despertó el 4 de mayo y no podía caminar.
Recordó: ‘Cuando desperté, me encontré en una silla de ruedas. No podía caminar.’
Jamie no quiere creer que ha sufrido un derrame cerebral y su terapeuta le habla de su ego: “Tienes que matar al viejo Jamie para que el nuevo Jamie pueda prosperar”.
Reflexionó además: ‘Dios me bendijo con dinero y fama, pero cuando me olvidé de Dios, Él me bendijo con golpes’.