Un par laborista expresó su preocupación por los atletas trans que competían en deportes diferenciados por sexo hace más de dos décadas, revelan los archivos.
Estelle Morris, Ministra de Estado de las Artes en ese momento, dijo que las leyes de igualdad de la UE podrían impedir que los órganos rectores del deporte excluyan a los competidores transexuales.
Su profética advertencia llegó mucho antes del debate actual sobre los atletas trans en los deportes y planteó muchas cuestiones que todavía nos atormentan hoy.
Destacadas atletas argumentan que no es seguro para ellas competir con aquellos que nacieron varones debido a diferencias en biología, fuerza y peso.
Según el artículo 19 de la Ley de Reconocimiento de Género de 2004, las personas trans pueden ser excluidas de los juegos diferenciados por motivos de competencia leal o protección.
En su carta, la exsecretaria de Educación, ahora conocida como Baronesa Morris de Yardley, advirtió que la Directiva sobre Igualdad de Trato propuesta por la UE podría entrar en conflicto con la Ley.
Escribió al entonces Secretario de Asuntos Exteriores, Jack Straw: “Estamos preocupados por el impacto de las directrices sobre los eventos deportivos diferenciados por sexo y los clubes deportivos privados y las nuevas normas sobre la participación de las personas trans en el deporte establecidas en la Ley de Reconocimiento de Género de 2004”. . .
“Necesitamos asegurarnos de que podemos mantener las exenciones relacionadas con el deporte a la discriminación de género existentes en el Reino Unido en la Sección 19 de la Ley de Reconocimiento de Género de 2004, que permite a los órganos rectores del deporte establecer reglas que excluyan a las personas transexuales de eventos deportivos diferenciados por sexo cuando sea necesario para garantizar seguridad. La nueva directiva no perjudicará la competencia leal ni los motivos de seguridad.’
La par laborista Estelle Morris advirtió que la directiva de la UE podría entrar en conflicto con la Ley de Reconocimiento de Género de 2004, que permite excluir a las personas trans de los deportes diferenciados por sexo.
La baronesa Morris advirtió que la legislación de la UE podría chocar con sectores industriales, como los talleres de escritura creativa para mujeres víctimas de violencia doméstica.
También advirtió que la directiva podría chocar con áreas de la industria donde había un “fuerte interés público” en restringir el acceso por motivos de género.
“Un ejemplo podría ser un taller de poesía o escritura creativa para mujeres víctimas de violencia doméstica, donde el concepto de “espacio seguro” es importante”, escribe.
Añadió que las clases de baile exclusivas para mujeres y niñas tienen más probabilidades de atraer a personas de comunidades culturalmente diversas con “códigos de vestimenta más estrictos y actitudes más restrictivas hacia las actividades mixtas de género”.
Añadió que si no lograba lograr una exclusión voluntaria más amplia para tales casos, “entonces debería considerarse bloquear la directiva”.