Donald Trump anunció el viernes que conmutó la sentencia de George Santos, el exrepresentante de Nueva York y fabulista en serie caído en desgracia que fue sentenciado a más de siete años de prisión después de una breve carrera política marcada por fabricaciones extranjeras y conspiraciones fraudulentas.
El republicano de Nueva York fue sentenciado en abril después de declararse culpable el año pasado de fraude electrónico y robo de identidad agravado.
“Acabo de firmar una conmutación, liberando inmediatamente a Jorge Santos de prisión”, publicó Trump en su plataforma de redes sociales.
En julio, Santos se presentó en una prisión federal en Nueva Jersey, donde comenzó a cumplir una sentencia de 87 meses por cargos que finalmente llevaron a su expulsión del Congreso en 2023.
Santos apeló a la administración Trump para que intervenga pocas horas después de su sentencia, afirmando en publicaciones en las redes sociales y la entrevista Que fue demasiado duro y políticamente motivado.
Marjorie Taylor Green, una destacada ex colega de la Cámara, instó a la Casa Blanca a conmutar su sentencia, diciendo en una carta enviada pocos días después de su sentencia de prisión que la sentencia era “una grave injusticia” y producto de una extralimitación judicial.
El juez del caso de Santos estuvo de acuerdo con los fiscales federales en que se justificaba una sentencia más severa porque Santos no parecía arrepentido, a pesar de lo que él y sus abogados afirmaban.
Santos mintió ampliamente sobre su biografía antes y después de ingresar al Congreso, donde hizo historia al convertirse en el primer republicano abiertamente LGBTQ+ elegido allí.
El cambio de Santos es el último indulto de alto perfil de Trump para un ex político republicano desde que retomó la Casa Blanca en enero.
A finales de mayo, indultó al exrepresentante republicano de Nueva York Michael Grimm, quien se declaró culpable en 2014 de no declarar salarios e ingresos en un restaurante que dirigía en Manhattan.
Después de la circulación del boletín
También indultó a John Rowland, el ex gobernador de Connecticut cuya prometedora carrera política se vio empañada por un escándalo de corrupción y dos penas de prisión federal.
El propio Trump estaba allí. Condenado en un tribunal de Nueva York En un caso de dinero secreto el año pasado. Se burló del caso como parte de una caza de brujas por motivos políticos.
Santos fue alguna vez una estrella republicana prometedora.











