Según el informe, el secretario de salud, Wes Streeting, ordenó una revisión clínica del diagnóstico de afecciones de salud mental.
El Times informa que Streeting está preocupado por un fuerte aumento en el número de personas que solicitan prestaciones por enfermedad debido a diagnósticos de enfermedades mentales, autismo y trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH).
Ha pedido a destacados expertos que investiguen si el sentimiento normal se ha vuelto “demasiado patologizado”, según el periódico, mientras intenta lidiar con los 4,4 millones de personas en edad de trabajar que ahora reclaman prestaciones por enfermedad o invalidez.
La cifra ha aumentado en 1,2 millones desde 2019, mientras que, según se informa, el número de personas de entre 16 y 34 años que dejan de trabajar por enfermedades de larga duración debido a problemas de salud mental ha aumentado considerablemente durante el mismo período.
Streeting dijo a The Times que “sabía por experiencia personal lo devastador que puede ser para las personas que padecen problemas de salud mental, tienen TDAH o autismo y no pueden obtener un diagnóstico ni el apoyo adecuado”.
Y añadió: “También sé, por hablar con los médicos, cómo el diagnóstico de esta afección está aumentando rápidamente.
“Debemos mirar a través de una lente estrictamente clínica para obtener una comprensión basada en evidencia de lo que sabemos, lo que no sabemos y lo que estos patrones nos dicen sobre nuestro sistema de salud mental, el autismo y los servicios para el TDAH.
“Es la única manera en que podemos asegurarnos de que todos reciban un diagnóstico preciso y acceso oportuno a un apoyo eficaz”.
La revisión, prevista para el jueves, estará dirigida por el profesor Peter Fonagy, psicólogo clínico del University College de Londres, especializado en salud mental infantil, y Sir Simon Wesley, ex presidente del Royal College of Psychiatry, actuará como vicepresidente.
Fonagy dijo a The Times: “Examinaremos cuidadosamente la evidencia (de investigaciones, de personas con experiencias vividas y de médicos que trabajan en la primera línea de los servicios de salud mental, autismo y TDAH) para comprender de manera fundamentada que la demanda está creciendo”.
La medida se produce mientras los ministros intentan abordar las crecientes facturas de asistencia social.
A principios de este año, los ministros se vieron obligados a dar marcha atrás en los planes para reformar las prestaciones por discapacidad para aquellos con problemas de salud mental ante la oposición del Partido Laborista.
Kier Starmer señaló el lunes que el gobierno daría un nuevo impulso a la reforma de la asistencia social.
Dijo: “Necesitamos transformar esto; también debemos enfrentar la realidad de que nuestro estado de bienestar mantiene a la gente no sólo en la pobreza sino también sin trabajo”.
PA Media contribuyó a este informe.











