La renovación realizada por la arquitecta Winka Dubeldam de un edificio anodino de 800 pies cuadrados dio como resultado una casa mínima con una máxima sensación de dramatismo.
La renovación realizada por la arquitecta Winka Dubeldam de un edificio anodino de 800 pies cuadrados dio como resultado una casa mínima con una máxima sensación de dramatismo.