
Apenas unos días después de prestar juramento por tercera vez, un récord, el primer ministro Modi estaba a toda velocidad en la cumbre del G7 recientemente concluida. Modi, que estaba en el centro de la foto de familia del G7, aprovechó la oportunidad para ponerse del lado del presidente estadounidense, Joe Biden. La medida fue significativa ya que los dos líderes no tenían reuniones bilaterales programadas; Y con un calendario interno muy ocupado para Biden, es poco probable que los dos líderes se reúnan pronto. Para el Primer Ministro Modi, representó una oportunidad para abordar algunos factores irritantes en una relación bilateral que por lo demás sería sólida y estable.
A lo largo de los años, India y Estados Unidos han desarrollado vínculos profundos. Para Estados Unidos, India cumple varios requisitos clave: valores democráticos comunes, el único contraataque a una China siempre agresiva en Asia y una economía preparada para ser la de más rápido crecimiento del mundo. Para la India, vínculos más estrechos con Estados Unidos se traducen en asociaciones más profundas en tecnología y defensa; Además de reconocer la posición de Nueva Delhi como líder en el Sur Global.
Es irritante que las acusaciones sobre cualquier posibilidad de participación de la India en supuestos intentos de ejecuciones extrajudiciales en suelo estadounidense hayan causado fricciones menores entre los dos países. India ha negado oficialmente cualquier irregularidad en el asunto. Si bien tal paradigma no sería el aspecto definitorio de una asociación bipartidista fuerte y creciente, suavizaría los nervios de la administración Biden en un año electoral tenso.
No fue solo Biden, junto con el primer ministro canadiense Justin Trudeau, el primer ministro Modi llegó rápidamente al lugar. Canadá y la India han sido testigos de un cierto deterioro en sus relaciones. Nueva Delhi ha expresado su preocupación por la presencia de elementos anti-India que considera han sido protegidos por el gobierno canadiense. Las acusaciones de Trudeau sobre la participación de la India en el asesinato del separatista sij Hardeep Singh Nijja provocaron una reacción diplomática de la India. Si bien es poco probable que una conversación rápida con Trudeau resuelva los problemas subyacentes entre Ottawa y Nueva Delhi, el mensaje de la India en el escenario más grande del mundo es que está dispuesta a resolver las tensiones. Ahora corresponde al gobierno de Trudeau responder con la rama de olivo.
Dado que el Primer Ministro Modi ha aprovechado al máximo ser el centro de atención de la película, la decisión de la anfitriona, la Primera Ministra italiana, Giorgia Meloni, fue considerada cuidadosamente. Meloni, que llegó al G7 impulsado por un desempeño mejor de lo esperado en las elecciones de la UE, proyectó fuerza contra los otros líderes europeos del G7, todos los cuales enfrentaban la derrota en las encuestas. Meloni, que ahora busca un juego más grande en la Comisión Europea y las políticas que ésta adoptará, se ha posicionado como el único líder del G7 debido al Sur Global. Esto explica su acercamiento al líder más alto del Sur Global: el Primer Ministro Modi.
Maloney y Modi no son una pareja de poder geopolítico, pero los dos primeros ministros son ahora pesos pesados geopolíticos y la cumbre del G7 reflejó precisamente eso.
(Gauri Dwivedi Editor ejecutivo, NDTV)
Descargo de responsabilidad: estas son las opiniones personales del autor.