
Una posible guerra entre Israel e Irán enfrentaría a varias potencias militares entre sí.
Nueva Delhi:
En un discurso ante el Congreso de Estados Unidos el mes pasado, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, imaginó una nueva alianza regional en Medio Oriente, llamada “Alianza Abraham”. Esta alianza propuesta, una extensión de los Acuerdos de Abraham, uniría a los países con vínculos diplomáticos con Israel contra la influencia iraní, en particular su red de fuerzas proxy conocidas colectivamente como el “Eje de Resistencia”.
Abraham Jot
Los Acuerdos de Abraham, que comenzaron en septiembre de 2020, normalizaron las relaciones entre Israel y varios países árabes, incluidos los Emiratos Árabes Unidos (EAU), Bahréin, Marruecos y Sudán. La visión de Netanyahu para la Alianza Abraham se basa en estos acuerdos, buscando una alianza que pueda incluir a los socios diplomáticos actuales y futuros de Israel. La alianza tiene como objetivo contrarrestar lo que Netanyahu ha descrito como “terrorismo iraní”.
El llamamiento de Netanyahu al Congreso hizo eco de paralelos históricos, basándose en la petición de Winston Churchill a Estados Unidos en tiempos de guerra: “Danos las herramientas y haremos el trabajo”. Dijo que la asistencia militar estadounidense a Israel es esencial para la estabilidad y seguridad regionales.
Debido a las consecuencias políticas del asesinato de Ismail Haniyeh, líder del grupo armado palestino Hamás, en Teherán, Estados Unidos se comprometió a reforzar su presencia militar en Oriente Medio, desplegando un portaaviones liderado por el USS Abraham Lincoln, además de balística. barcos con capacidad de defensa antimisiles y un nuevo escuadrón de cazas.
Israel está coordinando estrechamente tanto con Estados Unidos como con el Reino Unido, preparándose para posibles ataques de represalia por parte de Irán. El ministro de Defensa israelí, Yoav Galant, se reunió con su homólogo estadounidense, Lloyd Austin, y con el secretario de Defensa británico, John Healy.
Una posible guerra entre Israel e Irán podría enfrentar a varias potencias militares entre sí.
Eje de resistencia: la red proxy de Irán
Desde la Revolución Islámica de 1979, Irán ha ampliado su influencia en todo el Medio Oriente a través de una red de grupos proxy, conocidos colectivamente como el Eje de la Resistencia. Esta red incluye a Hezbollah en el Líbano, los hutíes en Yemen, varias milicias en Irak y grupos militantes en Siria y Gaza. Estos representantes sirven a los intereses estratégicos de Irán, permitiéndole ejercer influencia y desafiar a sus adversarios en toda la región.
Líbano: Hezbolá
Hezbollah, establecido con apoyo iraní a principios de los años 1980, representó el primer representante importante de Irán en Medio Oriente. Financiado y armado por el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI), Hezbollah comparte la ideología islamista chiita de Teherán y recluta principalmente entre la población musulmana chiita del Líbano. Originalmente formado para luchar contra las fuerzas israelíes en el Líbano, Hezbollah se ha convertido en una fuerza militar y política formidable, que posee un arsenal de al menos 130.000 cohetes y misiles.
Gaza: Hamás y la Jihad Islámica Palestina
En los territorios palestinos, Irán ha forjado vínculos con grupos militantes como Hamás y la Jihad Islámica Palestina (PIJ). Estos grupos llevan mucho tiempo en conflicto con Israel y reciben apoyo financiero y militar de Irán.
Siria: el régimen de Assad
La alianza de Irán con el gobierno de Bashar al-Assad en Siria ha sido crucial desde el inicio de la guerra civil siria en 2011. Teherán ha proporcionado ayuda militar sustancial, incluidos unos 80.000 efectivos de combate, para reforzar las fuerzas de Assad. Además, Irán ha organizado y apoyado a varias milicias chiítas, como la Brigada Zainabiyoun (compuesta por combatientes paquistaníes) y la División Fatemiyoun (compuesta por combatientes afganos hazara), para apoyar al gobierno sirio.
Yemen: los hutíes
El movimiento hutí de Yemen, respaldado por Irán, se ha convertido en un actor clave en el conflicto regional. Originalmente formados en la década de 1990 y ganando fuerza después de 2014, los hutíes han recibido apoyo militar y financiero del IRGC.
Irak: milicias chiítas
Después de la invasión estadounidense de Irak en 2003, Irán amplió su influencia estableciendo y apoyando a varias milicias chiítas. Los grupos notables incluyen Kataib Hezbollah, Asaib Ahl-Haq y la Organización Badr. Estas milicias a menudo han atacado a las fuerzas estadounidenses y mantienen estrechos vínculos con Teherán.









