A un acuario en Japón se le ocurrió una idea única y original para alentar a su único pez luna residente después de que las instalaciones cerraran por renovaciones. El acuario Kaikyokan de Shimonoseki, hogar del pez luna, estará en proceso de renovación a partir de diciembre de 2024.
El acuario está cerrado al público y el personal ha notado que sus peces luna están luchando con el cambio. Dejó de comer medusas y comenzó a frotar su cuerpo contra el tanque, informó el periódico japonés Mainichi Shimbun.
Al principio, los trabajadores sospecharon que el pez luna había desarrollado problemas digestivos o estaba infectado con parásitos, pero luego empezaron a considerar otros factores.
Ex, Acuario ha sido publicado El pez se sintió un poco incómodo después de cerrarlo. “No sabíamos el motivo e intentamos diferentes cosas para solucionarlo, pero un miembro del personal dijo: ‘¿Tal vez está solo sin visitas?’ Estaba 99 por ciento seguro de que no podía ser, pero puse algunos uniformes del personal como último recurso”.
Para crear la ilusión de personas observando peces, el personal adjuntó recortes de cartón de los visitantes del acuario. También usaron ropa y la instalación publicó una foto de la escena en X, mostrando al pez, quien se sintió reconfortado por la presencia de invitados falsos.
“Y luego… ¡al día siguiente, el pez luna se sintió aún mejor!” Dijo el acuario en una publicación. “Recientemente, ha estado nadando frente al tanque y batiendo sus aletas, ¡así que parece que está sano otra vez!”
“Honestamente, no lo puedo creer, pero el que se exhibe actualmente es muy curioso y cuando hay visitantes, puede que esté en mal estado de salud cuando desaparece repentinamente. Recientemente, se lo ha observado de frente. El tanque y su mano Saludó, ¡así que parecía gozar de buena salud otra vez!” es dicho
El Acuario Kaikyokan no es el primer acuario de Japón que utiliza ideas creativas para mantener felices a los peces. Durante el cierre de Covid de 2020, el Acuario Sumida de Tokio utilizó una estrategia similar para mantener activas a sus 300 anguilas jardineras manchadas pidiendo a los voluntarios que hablaran por FaceTime con los animales y salieran de sus escondites en los tanques.