Vivir en una ciudad ajetreada y contaminada podría aumentar el riesgo de que una enfermedad autoinmune afecte a 50.000 británicos, sugiere una investigación alarmante.
Los científicos han intentado durante mucho tiempo desentrañar qué causa exactamente la aparición del lupus eritematoso sistémico, más comúnmente conocido como lupus.
La afección, que también padecen Selena Gomez, Lady Gaga y Nick Cannon, hace que el sistema inmunológico del cuerpo ataque por error el tejido sano.
Pero investigadores chinos creen ahora que la exposición prolongada a la contaminación del aire “puede aumentar el riesgo de desarrollar lupus”.
El Dr. Yaohua Tian, experto en contaminantes del aire y enfermedades crónicas de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Huazhong y coautor del estudio, dijo: ‘Nuestro estudio proporciona información importante sobre la contribución de la contaminación del aire a las enfermedades autoinmunes.

Los científicos han intentado durante mucho tiempo desentrañar qué causa exactamente la aparición del lupus eritematoso sistémico, más comúnmente conocido como lupus. Selena Gomez, Lady Gaga y Nick Cannon también han padecido esta afección, en la que el sistema inmunológico del cuerpo ataca por error el tejido sano.

Pero investigadores chinos creen ahora que la exposición prolongada a la contaminación del aire “puede aumentar el riesgo de desarrollar lupus”. En la película, se sabe que Lady Gaga tiene lupus.
“Los hallazgos pueden servir de base para el desarrollo de normas más estrictas sobre la calidad del aire para reducir la exposición a contaminantes nocivos, reduciendo así el riesgo de lupus”.
Los pacientes con esta afección a menudo experimentan brotes en los que empeoran síntomas como dolor articular y muscular, fatiga extrema y sarpullido.
Estos episodios pueden durar varias semanas o más.
En el nuevo estudio, investigadores chinos siguieron a 460.000 pacientes y a 399 se les diagnosticó lupus durante un período de 12 años.
También se evaluaron los niveles medios de seis contaminantes cerca de sus hogares.
Entre ellas se incluyen las PM2,5, que corresponden a partículas de menos de 2,5 micrómetros de diámetro, el dióxido de nitrógeno (NO2), el óxido nítrico (NOx) y el dióxido de azufre (SO2).
Los cuatro están relacionados con problemas de salud como enfermedades cardíacas y demencia.
Estas partículas pueden ser emitidas por los gases de escape de los vehículos, productos de limpieza y estufas de leña, entre muchas otras cosas. Tan pequeños que viajan profundamente hasta los pulmones y el torrente sanguíneo.
Los investigadores encontraron que las personas expuestas a los niveles más altos de NO2 tenían un riesgo de lupus de uno en 1.000, y las expuestas a los niveles más bajos sólo tenían un riesgo de 0,075 en 1.000.
Esta tendencia se reflejó en las otras tres partículas.
Escribiendo en el diario, Artritis y ReumatologíaLos científicos dijeron que los hallazgos “proporcionan información importante sobre los factores ambientales que contribuyen a las enfermedades autoinmunes”.
Y añadieron: “Los hallazgos pueden servir de base para el desarrollo de normas más estrictas sobre la calidad del aire para reducir la exposición a contaminantes nocivos, reduciendo así el riesgo de lupus”.
Sin embargo, los investigadores reconocieron que el estudio tenía “ciertas limitaciones”, incluida la inscripción voluntaria de los participantes en el estudio.
Esto significa que pueden ser “más saludables, más conscientes de su salud o más dispuestos a participar en la investigación”, agregaron.
La Organización Mundial de la Salud ha exigido durante mucho tiempo que los países tomen medidas drásticas para combatir el flagelo de la contaminación, que se cree que mata a 7 millones de personas en todo el mundo cada año.
Según Lupus UK, una de cada 50.000 personas en el Reino Unido padece esta afección.

Los pacientes con esta afección suelen experimentar períodos en los que empeoran síntomas como dolor articular y muscular, fatiga extrema y erupciones cutáneas. Estos episodios pueden durar semanas o más. En la foto, Nick Cannon, conocido por tener lupus.
No existe cura para el lupus y existen tratamientos diseñados para ayudar a las personas a controlar sus síntomas.
El lupus puede variar desde leve, cuando causa problemas en la piel o las articulaciones, hasta grave, donde puede poner en peligro la vida de los órganos.
Los brotes, periodos en los que los síntomas empeoran, son otro aspecto de la enfermedad que los científicos todavía están intentando comprender.
Aún no está claro qué los desencadena y qué causa su declive.
Lo que complica las cosas es que algunos pacientes no experimentan ningún brote.